La hora de Europa
Después
de la victoria de Donald Trump en las elecciones americanas el mundo está
inquieto y tiene miedo. Les tengo que confesar que si fuera ciudadano
estadounidense hubiera votado a Hillary Clinton. Y no porque me gustara, pues,
sinceramente, me aborrece, sino porque entendía que era menos peligrosa para la
estabilidad del mundo que un populista como Trump; no soy partidario de los populismos, sean del signo que
sean.
No voy
a analizar la victoria ni la derrota, pero sí me gustaría decir que Hillary
perdió por no ser creíble, porque el pueblo americano no confiaba en ella y porque,
para muchos americanos, Obama fue una decepción. Y Trump ganó porque convenció a los americanos de que haría que los Estados Unidos volverían de nuevo a ser
un gran país (como si no lo fueran…), pero también porque hizo ver a los
americanos que estaba luchando contra el “establishment”
de Washington (la élite del poder), y todos sus lobbys (grupos de presión).
Si me
preguntan cuál es mi opinión sobre lo que ocurrirá a partir del 20 de enero
(investidura del Presidente electo), no se la podría dar, pues es una incógnita
para todos. Pero sí les puedo decir que, de momento, estoy tranquilo. Que la
Bolsa de Estados Unidos haya subido más de un 5% desde las elecciones es una prueba
inequívoca de que el pueblo americano y los inversionistas del mundo no están
nerviosos por esta elección. ¿Qué habrá muchos cambios? Seguro. Trump promoverá
un nuevo pensamiento en las relaciones eco-nómicas, así como una modificación
en las relaciones internacionales, que hará que el resto del mundo, pero sobre
todo Europa, tengan que compartir los gastos relativos a seguridad y defensa.
Pero aunque nos ponga muy nerviosos, su propio partido republicano y las realidades del mundo le acabarán imponiendo prudencia y ...
Pero aunque nos ponga muy nerviosos, su propio partido republicano y las realidades del mundo le acabarán imponiendo prudencia y ...
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Por Raimundo Abando Tartiere
¿Por qué va a crecer más EEUU con Donald Trump como presidente?
Publicado por Alejandro Mon